Ella

Ella era como una lampara de deseos que satisfacia
todos los caprishos, se convirtió en una sombra pálida
que no sobresalía, no tomaba decisiones porque, su
marido se encargaba de tomarlas por ella, no tenia
amigos porque solamente necesitaba a su esposo,
sus hijos se daban cuenta que ella era tan gris,
sabian que los queria pero no entendian porque
siempre estaba en segundo plano, como parte de la
vida pero no siendo participe activa de ella. Dejó de
ponerse tacones, dejó de arreglarse, ya no le
entusiasmaban los vestidos nuevos, ni teñirse el
cabello para verse un poquito más joven. Un día su
marido que absorbio su juventud, toda su vida, le llegó
con la sorpresa de que habia encontrado a otra mujer,
y la culpa era de ella, porque supuestamente, dejó de
ser aquella mujer coqueta, independiente y bella que
habia conocido, y no le importó el hecho de haber
mitigado por tantos años esas cosas que tanto amaba
o decia amar. Cuando salió de la casa, ella empezó a
llorar amargamente trás la puerta. Se moria de
vergüenza y de coraje, porque habia pasado tanto
tiempo tratando de complacer al que pensaba era el
amor de su vida, al que pensaba que la acompañaria
hasta el final de sus dias. De pronto empezó a reir sin
poder parar, casi hasta ahogarse sin poder respirar,
riendo a carcajadas, porque se dió cuenta que aquel
que había abandonado su casa, ya no era su marido,
se habia dado cuenta que ese hombre que habia
abandonado esa casa sencillamente fue un lastre,
un cinto o una cadena. Tomó una ducha, se vistió
coqueta, buscó unos tacones y despues de tantos
años volvió a ser ella, volvió a amarse a ella misma.

lo malo es eso ... no comprenden cuan enamoradas nos casamos..
dejamos tantas cosas y para que?